
10 consejos para los que tienen miedo de viajar en avión
Viajo constantemente en avión, y desde que era una niña he estado pálida, con manos y pies sudorosos y dificultad para respirar antes de volar.
Esto nunca me impidió emprender un viaje -conocer nuevos destinos es lo que más me gusta hacer, además de ser mi trabajo-, pero reconozco que las horas dentro del avión son extremadamente tensas para mí. Con la práctica, desarrollé algunos trucos, peculiaridades y pseudosoluciones que me ayudan a tener vuelos más suaves y reducir mi miedo a viajar en avión. Tal vez también funcionen para ti: ¡vale la pena intentarlo!
¿Ha pensado alguna vez en alquilar un helicóptero privado de lujo? tu oportunidad es ahora
CONSEJOS PARA ENFRENTAR EL MIEDO A VIAJAR EN AVIÓN
1. SIÉNTATE EN LA VENTANA
Dicen que los seres humanos tienen miedo de las cosas que no pueden controlar. Un asiento junto a la ventana ayuda a desmitificar la confusión al mostrar que el mundo de abajo todavía parece estar cerca, creando una sensación de vigilancia, como si estuviera al tanto de todo lo que está sucediendo o podría suceder.
2. VIAJE DE DÍA
Lo mismo ocurre con los vuelos diurnos: no hay nada más desesperante que enfrentarse a una tormenta en el aire de noche, en plena oscuridad, cuando no se ve nada fuera y no se tiene referencia. Aunque a menudo es más agotador, aburrido y lento, prefiero viajar durante el día.
3. SIGUE EL MAPA DE VUELO
Parece que entender en qué punto del globo está volando el avión, combinar esto con la información que tengo sobre las turbulencias y ser consciente de cuánto tiempo queda para llegar a una zona más tranquila hace que mi miedo desaparezca. Por ejemplo, si el vuelo pasa a través de esas bandas oceánicas más oscuras y la turbulencia de repente se vuelve fuerte, estoy “supervisando” hasta dónde llegar al mar azul más claro y luego al continente. Encender el mapa se convirtió en mi primera reacción cuando el avión comienza a temblar.
4. OBSERVAR A OTROS PASAJEROS
(y vea cómo se ven normales incluso en turbulencia)
Notar a las personas a tu alrededor que continúan haciendo lo que estaban haciendo antes de la confusión sin ningún drama ayuda a salir de la histeria. Me siento tonto al ver a mis compañeros de asiento viendo una película sin pausa, leyendo un libro sin parar y comiendo bien cuando dejo todo solo para… ¿Sentir miedo?
5. RESPIRAR, RESPIRAR Y RESPIRAR
Llevo años practicando yoga, el tiempo suficiente para enseñarme a respirar mejor y entender cómo este simple y muy importante acto tiene la capacidad de influir (¡y mucho!) en la mente. Apenas llega una turbulencia, me obligo a quedarme solo en el “inhala, exhala” hasta que pasa el miedo.
6. CHATEA CON LA PERSONA AL LADO
Si es su conocido, genial, pero incluso si no lo es, entablar una conversación con la persona en el asiento de al lado brinda cierto nivel de familiaridad que viene con un poco de tranquilidad. Incluso he tomado la mano de extraños en el vuelo (está bien, exagero).
7. BEBE VINO
Ir de vino con la comida es una de las tácticas más eficientes en el vuelo: sí, beber te hace sentir más relajado y, en consecuencia, sin pánico. Es cierto que no es el mundo ideal para quitarse el miedo, pero para mí es una de las cosas que más funciona. Hay gente que también aboga por tomar Dramamine y otros medicamentos, creo que solo empeora todo, me muero de sueño pero no puedo dormir porque el miedo no me deja y tengo un día horrible.
8. LEER LA TARJETA DE INSTRUCCIONES DE VUELO
La precaución nos hace sentir, de nuevo, más seguros y en falso control de la situación. Así que vale la pena coger la tarjeta con las posiciones e instrucciones de aterrizaje de emergencia y prestar atención al pequeño show de las azafatas para recordar: si el avión se estrella, no todo está perdido. Lo que nos lleva a…
9. ENTENDIENDO LA TURBULENCIA
Turbulencia es el nombre que se le da a los movimientos repentinos de aire a gran altura, pueden ser nubes de lluvia, fluctuaciones de presión, cambios de temperatura o las llamadas “cizalladuras del viento”, que son masas de aire que golpean repentinamente el avión. Por miedo a pasar, sepa que 1) los aviones están diseñados para enfrentar turbulencias, incluso las más severas; 2) los radares advierten a los pilotos acerca de las turbulencias; y 3) en una zona de turbulencia, el piloto frena, lo que mejora el equilibrio. Es decir, morir en un accidente de avión es algo muy, muy, muy improbable. Y, si sabemos eso y tratamos con probabilidades (en un Airbus A330 la probabilidad es de 1 en 2 783 874), ¿por qué no confiar en las matemáticas?
10. ENFOQUE EN EL DESTINO DEL VIAJE
Y, por último, recuerda que viajar es la mejor experiencia que existe, la que trae las lecciones más verdaderas y profundas de la vida. Conocer el mundo es un regalo que no todos tienen la oportunidad de experimentar. Lo sabemos, pero no está de más recordarlo: no vale la pena dejar que el miedo a viajar en avión lo estropee.